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Entrevista a Miguel Aldana de Bugaloop

Patricia Carmona     Entrevistas    19/07/2016

Hablando de aplicaciones de la tecnología para facilitar un aspecto concreto de nuestra vida cotidiana, hoy te presentamos Bugaloop, una plataforma que ayuda a los alumnos a prepararse el carnet de conducir. Hablamos con Miguel Aldana, CEO de Bugaloop, para hablar sobre el proyecto y las tecnologías implicadas.

1. ¿Qué es Bugaloop?

Bugaloop es una plataforma web que está desarrollada para ayudar al alumno a prepararse el carnet de conducir tanto de coche como de moto. A través de una plataforma teórica inteligente ofrecemos tutores personalizados que se adaptan al alumno en su aprendizaje. Además, y algo que se nos valora mucho, desarrollamos el primer buscador y comparador de clases prácticas de autoescuelas. A través de la plataforma el alumno puede ver las distintas ofertas de su zona con tan solo un click, fijándose no solo en el precio si no en la calidad, parte fundamental de Bugaloop.

El alumno puede decidir a qué autoescuela ir comparando diversos factores, no solo por su precio sino fijándose en algo tan importante para sacarse el carnet como es la calidad del servicio que presta cada autoescuela.

El alumno, por medio de valoraciones y comentarios de otros clientes, podrá ver la calidad del profesorado, la autoescuela y del propio vehículo que usará para sus clases.

2. ¿Cómo surgió la idea?

La idea surge realizando el MDB de ESIC. Mi vida esta ligada al sector debido a la cadena de autoescuelas que posee mi familia. Cogí los conocimientos necesarios para emprender y pude ver la carencia de digitalización del sector, bien por falta de conocimientos o bien por falta de medios.

3. ¿En qué ciudades tenéis autoescuelas registradas?

Tenemos en casi todas las Comunidades Autónomas. Estamos presentes en las ciudades más importantes, que ahora mismo para nuestro desarrollo son Sevilla, Mallorca, Bilbao, Madrid y Barcelona.

4. ¿El alumno necesita contratar un número mínimo de clases? ¿Cómo puede saber cuándo está preparado para el examen?

Actualmente, el sistema español no obliga a un numero mínimo de clases, aunque sí es cierto que es prácticamente imposible que con una sola clase una autoescuela se atreva a presentar a examen a un alumno.

A la hora de ver cómo está preparado del teórico con Bugaloop , tanto nuestros tutores como nuestros alumnos pueden hacerlo a través de su perfil. Se puede ver la evolución de cada uno y el nivel que tiene reflejado en un marcador. Nosotros para el teórico recomendamos que al menos se tenga un 85%.

En el caso del práctico, el profesor junto al alumno evalúan su nivel y toman las decisiones más lógicas.

5. ¿Qué beneficio obtiene un alumno si recibe clases prácticas de diferentes profesores de autoescuelas?

Recibir clases de diferentes profesores tiene sus ventajas e inconvenientes, eso está claro. Nosotros no intentamos fomentar que el alumno cambie de profesor, ya que cuando un alumno se adapta al profesor es mas fácil su aprendizaje

Nosotros solo buscamos ayudar a que el alumno tenga más opciones tanto económicas como por desplazamiento, y sobre todo y lo más importante, que pueda ver y valorar la calidad y experiencia mediante los comemtarios de otros alumnos .

Eso sí, hay que decir que actualmente existen casos en los que el profesor no es siempre el mismo y los alumnos están contentos. La realidad es que cada profesor explicará a su manera y tendrá una visión distinta y esto puede ayudar al alumno a captar lo mejor de cada profesor.

6. Cuéntanos el stack tecnológico de Bugaloop: lenguaje de programación, base de datos e integraciones con otras plataformas.

Bugaloop es una plataforma basada en un framework de código abierto que utiliza como lenguage principal el PHP5, a este framework se le denomina Laravel. La característica principal de Bugaloop es el pago de las clases online, cuyo sistema está hecho a través de la plataforma Redsys.

7. ¿Cómo fue la primera versión de Bugaloop?

Fue un 30-40% de lo que es hoy en día. Sacamos una plataforma teórica sencilla mientras invertíamos en la plataforma “inteligente”. En sus primeros pasos teníamos videos más largos y no tan directos como los de ahora. En la parte práctica fue también distinto, no dábamos tantas opciones. Los alumnos compraban bolsas de dinero para canjear en horas.

Hoy ya podemos decir que la plataforma inteligente es más que una realidad, con datos muy positivos en nivel de aprobados, videos muy intuitivos y sobre todo, la búsqueda de clases da muchas opciones. La visual es muy sencilla e intuitiva y el alumno puede ver las valoraciones de otros y decidir no por el precio si no por la CALIDAD.

8. ¿Cuál ha sido el reto tecnológico más importante que os habéis encontrado hasta ahora?

La experiencia. Transmitir una experiencia de libertad tanto a la hora de sacarse el carnet como de adaptar el sector de las autoescuelas al ecosistema digital.

El principal reto fue el de la sencillez para las autoescuelas en registro, inscribir oficinas, profesores, vehículos… y sobre todo, que publicar clases no fuera un problema sino una sensación de libertad. La parte mas analógica que se encuentra en Bugaloop son las autoescuelas. Los alumnos viven ya en el entorno digital por lo que su adaptación es mas sencilla.

9. ¿Cuál ha sido el mayor error tecnológico que habéis cometido?

El principal error tecnológico fue la disponibilidad horaria de las autoescuelas. Estuvimos observando el tiempo medio de clases a nivel nacional, que es de 45 minutos, así que decidimos adaptar el calendario solo a esas condiciones.

Esto supuso encontrarnos con autoescuelas que necesitaban un horario más personalizado, con clases de 40, 30 y 60 min y se nos estaba solicitando sin poder dar cobertura de primera hora.

Hoy en día está totalmente resuelto y las autoescuelas pueden solicitar tiempos personalizados y el cliente en una misma pantalla ya ve la programación de toda una semana con las distintas ofertas de la zona.

10. ¿Qué próximos hitos de desarrollo tenéis marcados?

Mejorar, mejorar y mejorar. Somos ambiciosos. Queremos dar más servicios y aumentar la usabilidad y satisfacción tecnológica de los clientes.