Entrevista a Asier Marqués @asiermarques - blackslot.com

¿Cuando empezaste a tener curiosidad para emprender?

Con 17 años me interesé por primera vez del potencial social de internet. Por esa época pretendía ser un gran deejay, mi afición por la música electrónica me empujaba a destinar muchas horas a encontrar la música, entrenar y preparar mis sesiones para las competiciones en las salas a las que nos presentábamos. Había bastante movimiento en internet por foros compartiendo música, preguntando nombres de canciones que se escuchaban en las cintas de las discotecas locales y gente quedando para conocerse. Era una herramienta tremenda para darse a conocer, aun sin disponer de dinero ni contactos en el mundillo. En cuanto tuve nociones de programación, tres años más tarde, cree un sitio web basado en phpnuke para una comunidad de amigos de la universidad de Sarriko en Bilbao, me sorprendió lo rápido que se expandió para haber sido creado por un tipo ajeno a esa universidad. Sin embargo no me interesé por emprender hasta el 2004 con 21 años, año en el que empecé a buscar trabajo. Inspirado por mi padre que creo una empresa años atrás, me di cuenta de que era posible abrirse camino por uno mismo, pero no tenía ni experiencia ni idea de por dónde empezar y sobre todo por qué hacerlo. En el 2006, teniendo dos clientes con los que estábamos ya trabajando, me asocié con otras cuatro personas para crear una empresa de servicios. El resultado fue un fracaso ya que solamente uno de los otros promotores, se decidió a dejar su puesto de trabajo por este reto. Al final abandonamos el proyecto, decisión que me estuvo torturando durante los años siguientes. Durante los años posteriores empecé varios proyectos en internet que acabaron sin ninguna repercusión destacable. En 2009, tras un año como autónomo, fundé Blackslot junto a Sergio, al año siguiente entró Jonathan al proyecto, fijando el equipo directivo que actualmente tenemos.

¿Cuando surgió la idea de tu startup?

La idea de Blackslot no es algo destacable por su originalidad, ya que se trata de una empresa de servicios TI. La diferencia es su enfoque en proyectos exclusivamente orientados a internet. En el 2008 viví la experiencia de ser un desarrollador web autónomo que tenía que lidiar con las empresas de hosting para que me ofreciesen un servicio un poco más avanzado a sus planes de administración o de hosting compartido. Era impensable para mí que fuera tan difícil para ellas ofrecer soluciones básicas que en otras empresas en las que había trabajado como empleado, estaban a la orden del día. Hablaba sobre ello con mis dos actuales socios ya que trabajaban en la misma empresa de hosting de la cual era yo cliente, y coincidían conmigo en que se podía ofrecer un servicio más adecuado a necesidades de infraestructura con requerimientos más avanzados.

¿Como os conocisteis los fundadores y el equipo?

Nos conocimos durante nuestra formación superior y después de terminar, continuamos buscando formación técnica. Muchas veces planeábamos las vacaciones juntos para poder asistir a un master, curso u evento que nos aportase más conocimientos. Cuando di el paso a trabajar como autónomo, se convirtieron en mis proveedores para terminar siendo socios.

¿Tuviste que pivotar varias veces la idea para validar el modelo de negocio?

Teníamos claro desde el principio que nuestro modelo debía ser suscripción. Tuvimos que compaginarlo al principio con intensos proyectos de desarrollo o servicios de sistemas, que se cobraban por horas o proyecto, para inyectar liquidez en la empresa mientras las suscripciones crecían.

¿Como genera ingresos vuestro negocio?

Nuestro negocio se basa en suscripción, con algún ingreso de proyectos de clientes, que actualmente seleccionamos con cuidado ya que este último modelo no escala. Nuestro objetivo es basarlo en un modelo 100% suscripción.

¿Como validasteis vuestro modelo de negocio?

Vendiendo. La única forma de validar que una cosa funciona desde mi experiencia es probándola en el mercado real.

¿Puedes comentar 3 errores que cometiste que te hicieron perder tiempo o casi abandonar?

1. No ser fieles 100% a una visión común consensuada por todos los socios. Las personas técnicas tendemos a dispersarnos, y eso ocurre cuando no tienes claro de forma unánime a donde te diriges a largo plazo. 2. Poner un precio demasiado barato al servicio o producto que trataba de vender. 3. Pensar a corto plazo, tomando decisiones que posiblemente no son las más rentables o beneficiosas al cabo de unos meses o un año.

¿Como conocisteis vuestros primeros clientes? Nuestros primeros clientes eran empresas de nuestro ambiente cercano, entorno profesional y gente del sector que tenían la demanda que nosotros suplíamos. Al principio se pueden captar muchas relaciones en eventos para emprendedores. Adicionalmente y en nuestro caso, ofrecer el hosting basado en plataforma Microsoft que la comunidad .net no encontraba en España, nos abrió mucho camino.

¿En que momento buscasteis financiación?

Reconozco que tanteamos el mundo inversor en España. No lo vimos serio, seguramente porque no llegamos a conocer a gente que realmente hace estas cosas en serio, y nos decantamos por el bootstrapping. Al cabo de un tiempo, con el objetivo de hacer una inversión en infraestructura sin quedarnos sin liquidez, recurrimos al banco, que tras consultar en varias entidades, fijamos un acuerdo con Caja Rural de Navarra, que no nos puso ningún problema.

¿Que consejo le daríais a alguien que quiere empezar una startup?

Que si tiene dudas, una novia o novio que le llama de 5 minutos o pocas ganas de trabajar en Agosto que no lo haga. Es muy duro sobre todo en España en este momento y requiere mucho sacrificio personal. Es una guerra de desgaste psicológico, llena de decepciones, que se gana trabajando duro. Para la gente técnica diría que piense siempre que la tecnología es imprescindible, pero no lo más importante. El marketing, la comunicación y sobre todo la comunidad, son claves para llegar a alguna parte con pocos recursos.